Mi tiempo en Oaxaca ha estado maravilloso. Ha excedido mis expectaciones completamente. Antes mi viaje aprendí muchas cosas sobre la historia, política y más que todo la comida! Pero estudiar Mexico miles de millas afuera es diferente que estudiarlo en lugar.
Primero, antes de viajar yo aprendía sobre la historia Zapoteca de este región de Oaxaca. Sabía que eran un gran civilización y que había muchas ruinas. Después visité Monte Alban llegué en un mejor conocimiento del alcance de este civilización. Por ejemplo, aprendí que los Zapotecas hicieron la primera zona urbana en todas de las Américas.
Segundo, antes de viajar sabía que hay un sindicato de maestros muy grande en Oaxaca. Primero pensaba que era algo completamente bueno porque provee una opción para resistir la corrupción en el gobierno y hacer cambios en la sistema de educación. Pero después mi experiencia en Oaxaca aprendí que no es tan simple. Por ejemplo aprendí que muchos de los maestros no tienen títulos y algunos reciben el trabajo por causa de herencia. Esto es loco a mi.
Tercera, antes de viajar aprendí mucho sobre la comida típica de Oaxaca que incluyeron los chapulines, mole y tlayuda. Todo parecía rico y yo tenía muchas ganas de probarlos. En el mercado de 20 de noviembre tuvo todo. Los chapulines fueron muy distintos y a mí no me gustó. El mole fue bueno pero siempre pensaba que falto algo como una hierba o algo picante. Pero las tlayudas! Me encantó muchísimo! Eran riquísimo y mi comida favorita sin duda!
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